Tener la boca seca y pastosa puede ser algo puntual y pasajero, debido a que no nos hemos hidratado lo suficiente o a una situación estresante, o puede ser el resultado de nuestros hábitos (por ejemplo, por fumar o por respirar por la boca). En algunos casos, no obstante, también puede ocultar un problema de salud que conviene abordar, especialmente si es algo que se prolonga en el tiempo o se acompaña de otros síntomas.

¿Qué funciones tiene la saliva en la boca?

Las glándulas salivales son las encargadas de producir la saliva, una sustancia compuesta principalmente de agua (cerca del 95%), pero que también contiene electrolitos, moco, glóbulos blancos, enzimas y sustancias antimicrobianas.

La saliva es esencial para mantener nuestra boca y garganta lubricadas y ayudar a la deglución de los alimentos y a la digestión, además de proteger nuestros dientes de las bacterias dañinas.

Tenemos tres pares de glándulas salivales: las parótidas (situadas justo delante de las orejas), las submandibulares (ubicadas debajo de la mandíbula) y las sublinguales (debajo de la lengua).

En una situación normal, los adultos producen unos 720 mililitros de saliva al día, aunque esto depende de múltiples factores como la hora del día, la cantidad de líquido ingerido o los alimentos que comemos, etc. Además, hay diversos factores e incluso enfermedades que pueden afectar a la producción de saliva.

Boca seca y pastosa: posibles causas

Cuando hablamos de tener la boca seca y pastosa (que se conoce también como xerostomía), nos referimos a una falta de producción de saliva, que provoca una sensación pegajosa en la boca y una cierta dificultad para hablar o tragar.

La boca seca puede deberse a diferentes causas, aunque la principal es no haber bebido suficiente, que hace que nuestras glándulas salivares no tengan suficiente agua para producir saliva. Otras causas incluyen:

  • La deshidratacióndebida a una sudoración excesiva, fiebre, diarrea o vómitos, un ambiente demasiado seco, etc.
  • Una situación de estrés, nerviosismo o ansiedad, que hace que se contraigan los vasos sanguíneos que van a las glándulas y la producción de saliva se vea alterada.
  • El uso de determinados medicamentos, como los antihistamínicos, los antidepresivos o algunos medicamentos para la hipertensión, pueden reducir la producción de saliva. Los tratamientos de quimioterapia o radioterapia también pueden afectar a las glándulas salivales.  
  • Una lesión en los nervios de la zona de la cabeza o el cuello.
  • Una obstrucción de las glándulas salivales.
  • Hábitos como fumar o respirar por la boca.

La boca seca y pastosa también puede ser un síntoma de alguna enfermedad, como:

  • El síndrome de Sjögren, un trastorno autoinmunitario que afecta a las glándulas que producen las lágrimas y la saliva.
  • La diabetes, pues los niveles altos de azúcar en la sangre afectan a la producción de saliva.
  • Puede ser un síntoma de alzhéimer, pues el cerebro de quienes lo sufren a menudo no envía la señal de que tienen sed.  
  • El VIH/SIDA, por los efectos del virus en la función de las glándulas salivales.

En cualquier caso, si tienes la boca pastosa y seca con frecuencia conviene consultar al médico para que analice cuál es la causa.

Boca seca y pastosa: remedios naturales

El tratamiento de la boca seca y pastosa dependerá de cuál sea su causa y es especialmente importante identificarla para poder hallar la mejor solución al problema. En caso de que se deba a una enfermedad, como el síndrome de Sjögren, el médico puede recetar sustitutos de saliva artificial o algún medicamento.

En cualquier caso, es fundamental asegurar una buena hidratación (unos 2 litros de agua al día) y evitar el alcohol y el tabaco, sustancias que deshidratan y resecan las mucosas. Asegúrate también de que tu colutorio no contiene alcohol, puede podría resecar aún más la boca.

Es especialmente importante tener una buena higiene bucodental, pues cuando ocurre de forma prolongada, la falta de saliva favorece la aparición de problemas dentales como la caries o la enfermedad de las encías.

Además, hay algunos remedios naturales que pueden resultar muy útiles para combatir la boca seca y pastosa: